Katy Perry aparece en la portada del mes de agosto de la revista Rolling Stone y lo hace de una manera sensacional. La cantante se olvido de los atuendos extravagantes y optó por un conjunto de lencería bastante mono.
Y aunque las fotos de la revista son lo que verdaderamente vale la pena, tampoco hay que dejar de echar una mirada a la entrevista que la cantante brindó a la publicación, en donde entre otras cosas habla de sus padres y del lenguaje secreto que les permite hablar directamente con Dios. ¡Es que esta chica está llena de extravagancias!
También soltó un par de joyas respecto a crecer en una familia tan religiosa como la suya, como el hecho de cambiarle el nombre a los "huevos endiablados" por "huevos angelicales" y no poder comer Lucky Charms por que la palabra "Lucky" se asemejaba a la palabra Lucifer. Esa sí que es una infancia retorcida.
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